San Yves, también conocido como San Yves de Kermartin, es un santo bretón canonizado por la Iglesia Católica. Nació en 1253 en el pueblo de Kermartin en Bretaña, Francia, y se convirtió en abogado antes de convertirse en sacerdote. Pasó su vida ayudando a los pobres y oprimidos, y llegó a ser conocido como el "defensor de los pobres".
Saint Yves se educó en la Universidad de París, donde estudió derecho canónico. Se hizo abogado y trabajó en Rennes, donde se ganó la reputación de ser un abogado justo y justo que defendía los intereses de los pobres. También fue conocido por su compromiso con la igualdad y la justicia social.
Relicario que contiene unreliquia de San Yves en Reliquias.es
En 1283, San Yves fue ordenado sacerdote y comenzó a trabajar como párroco en Kermartin. Continuó abogando en nombre de los pobres y oprimidos, usando sus habilidades legales para ayudar a resolver sus problemas. También fundó una hermandad para ayudar a los pobres y enfermos.
San Yves se hizo conocido por su generosidad y bondad hacia los pobres y oprimidos. Fue venerado como santo desde su muerte en 1303, y fue canonizado por la Iglesia Católica en 1867. Ahora es considerado el santo patrón de Bretaña y se celebra anualmente el 19 de mayo.
También se le considera patrón de los abogados, juristas y notarios, y se le suele invocar para obtener justicia y la protección de los derechos de los menos favorecidos.
La capilla de Saint-Yves de Tréguier es un popular lugar de peregrinación para los bretones, que acuden allí para rezar y pedir la intercesión de Saint Yves por las causas justas. También es honrado en muchas otras iglesias y catedrales de Bretaña y otras partes de Francia.
San Yves es un santo bretón canonizado por la Iglesia Católica que dedicó su vida a ayudar a los pobres y oprimidos. Se le conoce como el "defensor de los pobres" y es venerado como patrón de Bretaña y de los abogados, juristas y notarios. Su capilla en Tréguier es un popular lugar de peregrinación para los bretones.
Murió el 19 de abril de 1303 y fue enterrado en la iglesia de Saint-Tugdual en Tréguier.
Durante los siglos siguientes, los bretones continuaron venerando lareliquias de Saint-Yves. En 1522, se construyó una capilla sobre su tumba en Tréguier. En 1619 se erigió un gran altar en su honor en la iglesia de Saint-Tugdual. En 1625 se exhumó el cuerpo de Saint Yves y se descubrió que permanecía incorrupto. Las reliquias fueron trasladadas a un relicario de plata y expuestas para la veneración de los fieles.
Durante los siglos siguientes, las reliquias de San Yves fueron transportadas a varias iglesias y capillas de Bretaña, donde fueron veneradas por los fieles. En 1794, durante la Revolución Francesa, las reliquias fueron robadas y desaparecidas. No ha habido noticias de su ubicación desde entonces.
A pesar de la pérdida de las reliquias, la memoria de San Yves siguió celebrándose en Bretaña. Se construyeron iglesias y capillas en su nombre, se erigieron estatuas y pinturas para conmemorarlo. Sigue siendo un santo muy popular en Bretaña, donde se le considera un símbolo de justicia e integridad.